Hace aproximadamente 30 años, nació Kimberly Reyes Hernández, una barranquillera que se ha esforzado por crearse un espacio en la farándula colombiana; ganándose igualmente, los corazones de muchas personas. Aunque para ella puede ser complicado hablar de aquellas cualidades que la hacen especial, destaca algunas constantemente mencionadas entre los amigos cercanos: “Siempre estoy alegre, dispuesta, trato de tener la mejor actitud ante cualquier situación; también, resaltan que soy detallista, pues intento acordarme de las cosas que les gustan a los demás. Normalmente, digo la verdad; sin embargo, procuro hacerlo de buena manera, no me agrada herir a nadie, entonces me cuido mucho de eso; además, soy fantasiosa, no sé si es una cualidad, pero pienso que quienes seguimos creyendo en la magia, todavía estamos cerca de ese lado que aún sigue siendo niño e inocente”, describe la actriz.
Al pedirle recordar algunas vivencias de la niñez, es inevitable no rememorar la separación de sus padres, considerándola una experiencia determinante; a pesar de ello, remarca haber sido feliz, pues las tardes de helado también quedaron grabadas en la memoria. Más adelante, llegó la etapa de elegir el rumbo profesional, pero para Kimberly no fue sencillo hallar su lugar, debido a que siempre han primado en ella dos aspectos: racional y artístico. A razón de lo anterior, inició estudiando Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales en la Universidad Externado de Colombia; sin embargo, transcurrido el primer periodo decidió trasladarse a Ciencias Políticas dentro de la Universidad de los Andes, “porque las finanzas no me gustaban mucho”, detalla. Empero, seguía sin encontrarse cómoda en la ciudad donde estaba —Bogotá—, provocando el regreso a Barranquilla; allí, empezó a cursar Diseño de Modas, pero llegando al último semestre, el destino le presentó una vía diferente.
Las puertas del entretenimiento empezaron a abrirse para la barranquillera luego de participar en el concurso de belleza Miss Mundo Colombia durante el 2009: “Eso no se encontraba en mis planes, pero estaba pasando una ruptura amorosa y me puse flaca, pesaba alrededor de 49 kilos; entonces, me preguntaron si quería ser reina y en ese despecho acepté, pues tenía el espíritu de mujer empoderada que quiere darlo todo”, comenta Kimberly. Allí, declara haber realizado el debut actoral en televisión, porque aunque ingresó al certamen sin ningún objetivo claro, terminó completamente inmersa en el rol, convirtiéndose en una concursante sonriente; “sin duda alguna, tomar la decisión cambió mi vida, ya que era una niña que mantenía en Converse, con su pelo alborotado, más hippie, cargando carpetas de diseño; y cuando entro al universo del reinado el chip me cambia, de pronto eso fue lo que me llevó a realizar el primer casting”.
La trayectoria audiovisual comenzó en ‘Sweet, el dulce sabor del chisme’, ya que los encargados la llamaron con el fin de realizar un casting; el cualrechazó, pues vivía en Barranquilla. A pesar de ello, volvieron a contactarla y le insistieron hasta que aceptó: “Cuando llegué a ‘Sweet’, me piden presentar el programa, no tenía ni idea; teleprónter, cámaras, luces, grabando en vivo, pero lo hice. Se me cayó el apuntador, yo no sabía a qué cámara miraba; sin embargo, me fui como pez en el agua y en verdad todos reíamos, la pasamos súper chévere y esa fue la primera vez que aparecí en televisión”, rememora Reyes. Mientras estaba allí, la esposa del director, Herney Luna, la propuso para el papel de Luz Mary en ‘El Joe, la leyenda’; tras efectuar la prueba, salió victoriosa. Al finalizar dichas grabaciones “sentía pánico, porque decía Dios mío, nunca trabajé por una carrera de actriz y estoy enfrentándome a un personaje que no sé si vaya a prosperar; entonces, empecé a estudiar, Víctor Hugo Trespalacios se convirtió en mi profesor de clases particulares”, detalla.
ENFOQUE CARIBE: ¿QUÉ RECUERDOS PODRÍA MENCIONAR DE SU PRIMERA EXPERIENCIA ACTORAL?
KIMBERLY REYES: Mi novela favorita en cuanto a combo ha sido ‘El Joe, la leyenda’, he ganado más amistades en otras; por ejemplo, en ‘Diomedes, el Cacique de La Junta’, ya que Orlando Liñán hoy en día es mi compadre, está entre mis mejores amigos; pero en aquel momento, respecto al crew —personal—, fue algo impresionante, porque éramos una familia. Nos vinimos para Barranquilla, yo estaba de anfitriona y los llevé a todas partes; entonces, esa producción aparte de que fue la primera, me quedó grabada, debido a la calidad de seres humanos, y cuando la recordamos, decimos que como ese proyecto, ninguno.
E.C.: HASTA ESTE MOMENTO, ¿CUÁL HA SIDO EL PAPEL MÁS DIFÍCIL QUE HA INTERPRETADO Y POR QUÉ?
K.R.: Todos son difíciles, cada uno trae algo que no está en ti. A pesar de ello, ‘La Diabla’ —‘El final del paraíso’— fue bastante complicado, porque debía imitar al personaje, obviamente yo le he ido imprimiendo mi sello y evidentemente somos dos personas diferentes, pero hacerlo no resultó nada fácil, tuve que entrar en entrenamiento de voz; además, la concentración y presión de todo el mundo encima, representó de verdad un reto actoral muy difícil. Entre otros papeles, por ejemplo, Lucía —‘Diomedes, el Cacique de La Junta’— me dejó emocionalmente cargada; sin embargo, depuró muchos sentimientos y creo que así, logré hacer catarsis para sacar cosas que de pronto estaban guardadas y no quería seguir reprimiendo; entonces, Orlando pagaba los platos rotos.
E.C.: ¿CÓMO FUE LA PREPARACIÓN PARA LAS PELEAS EN ‘EL FINAL DEL PARAÍSO’?
K.R.: ‘La Diabla’ en esta temporada está trabajando en la DEA —Administración para el Control de Drogas, por la traducción al español—; entonces, debe obtener preparación técnica con armas, lo cual es completamente diferente a lo que ella ha sido siempre; debido a esto, tomamos clases previas para saber utilizarlas como agente y tener más recursos en los delitos. Aparte, en el tema de la pelea, tuvimos entrenamiento con stunts —acróbatas—, del grupo llamado ‘Golpe de gracia’; pues tenemos un enfrentamiento importante que nos llevó alrededor de ocho horas de ensayos, porque eran tres bloques, donde usamos cuchillos, sartenes, cosas que son cortopunzantes; por ello, todo eso requería estar muy bien medido, teníamos dobles, pero el 90% de la escena la realizamos nosotros.
E.C.: ¿QUÉ CARACTERÍSTICAS DE LA INDUSTRIA COSMÉTICA CAPTARON SU ATENCIÓN?
K.R.: Cuando estaba en Bogotá hallé maquilladores, quienes me dejaban naranja, la nariz ancha, los ojos y cejas disparejas; era un desastre y sentía que perdía lo bonito, en lugar de verme mejor. Tras esa situación, yo dije: esto no me puede quedar grande, tengo que aprender a maquillarme; a partir de allí, comencé a prestarle mayor atención a los makeup artists, mirar videos en YouTube, estudiar a través de Internet, probaba lo que veía y compraba productos. Luego, con el boom aparecieron marcas nuevas, eso me hizo enamorar cada vez más, notando diferentes necesidades; por ejemplo, si tenía fotografías, grabaciones o iba a salir, utilizaba artículos distintos; entonces, encontré usos particulares que para mi profesión eran fantásticos, pues sin importar la ocasión, siempre existía un cosmético acorde a ese momento.
E.C.: ¿CUÁL ES LA PRINCIPAL INSPIRACIÓN CUANDO VA A DESARROLLAR SUS LOOKS?
K.R.: Me inspiro en aquello que observo. Hay una maquilladora, se llama @nikki_makeup, que crea unos looks de pieles extremadamente naturales con bastante iluminación y mucho glow, de verdad es súper bonito; además, se arriesga a realizar cosas que la gente usualmente no haría y normalmente acierta, porque hace lucir a las mujeres hermosas. También, me encanta el trabajo de Patrick Ta, es fantástico. Entonces, yo busco de acuerdo al mood —estado anímico— que tenga, pero casi siempre cuando quiero verme fresca y natural voy a esas dos cuentas.
E.C.: ¿QUÉ LA INCENTIVÓ A CREAR LA PÁGINA DE INSTAGRAM @TIPSBYKIMREYES?
K.R.: @tipsbykimreyes nació por una necesidad, y es que en mi cuenta como Kimberly Reyes —la actriz—, me siguen hombres o personas que no están tan interesadas en el tema de belleza, sino que sencillamente quieren conocer más de mí; debido a ello, utilicé el usuario alterno de tips, que de hecho a veces no me da tiempo de postear todo lo que me gustaría, pero es donde publico cada vez que me acuerdo de un detallito o de algo que a mí me funciona y a lo cual recurro cuando tengo una situación con el maquillaje, skincare o cabello. Lo utilizo a modo de ventana para un público seleccionado, es decir, los seguidores que desean saber de esa temática.
E.C.: ¿CÓMO DESCRIBE LA EXPERIENCIA DE EMPRESARIA EN KIMBERLY REYES B&C Y QUÉ PAPEL JUEGA SU ESPOSO EN ESTE ÁMBITO?
K.R.: Toda la vida me ha encantado el tema del emprendimiento, pues mi mamá es comerciante; por ello, siempre quise trabajar y sigo esforzándome en tener la empresa propia, yo creo que todavía busco el punto en el cual encuentre estabilidad, el look y formato donde la quiero ver. Permanentemente digo que estoy en proceso de experimentar, mientras trabajo detrás de cámaras en productos. En ese sentido, Federico juega un rol muy importante, porque es mi compañero en esto; ocupándose de la parte administrativa y financiera. Además, aunque sé negociar, detesto hacerlo; entonces, cuento con él en ese aspecto de decir cómo hay que hacer las cosas.
El 2020 será un periodo de proyectos nuevos: “Venimos con muchas cosas en televisión, estamos próximos a darles algunos adelantos y quiero tener funcionando mi empresa tal cual la sueño”, describe la artista. En ese sentido, tiene grandes sorpresas en Kimberly Reyes B&C, pues la organización representa parte fundamental de los sueños y anhelos que espera ver materializados; a razón de ello, actualmente se encuentra desarrollando la línea de maquillaje: “Las fórmulas en las que estoy trabajando me tienen súper orgullosa y dichosa, no veo la hora de lanzar los productos”, confiesa. Finalmente, expone un aspecto que para ella ha significado la clave del éxito: la autenticidad, es decir, ser fiel a sí misma, preocupándose por hacer todo de la mejor manera posible, siendo disciplinada y responsable. Asimismo, destaca que todos poseen una luz, eso en lo que son buenos y si logran identificarlo a tiempo, podrán sacarlo a relucir, evitando perder la esencia; teniendo en cuenta que a veces las personas dejan de brillar o no salen adelante, porque están viviendo a través de los ojos de alguien más. Por su espontaneidad, talento y sencillez, Kimberly Reyes estuvo en la portada de Enfoque Caribe.
